martes, 25 de diciembre de 2018

SAN JUAN DAMASCENO

(*675/+749) Presbítero y Doctor de la Iglesia

Su fama se debe principalmente a que fue el primero que escribió defendiendo la veneración de las imágenes. Nació en Damasco (Siria) en el año 675 en una ilustre familia árabe cristiana. Ingresó en el convento de San Sabas en Jerusalén, en el cual se dedicó por completo a leer y escribir. El Papa Benedicto XVI resalta que “San Juan Damasceno fue, además, uno de los primeros en distinguir, en el culto público y privado de los cristianos, entre la adoración (latreia) y la veneración

"Detengámonos a contemplar el pesebre; ENTREMOS EN LA VERDADERA NAVIDAD con los pastores, llevando al Niño Jesús lo que somos" (Papa Francisco)

(proskynesis): la primera solo puede dirigirse a Dios, sumamente espiritual; la segunda, en cambio, puede utilizar una imagen para dirigirse a aquel que es representado en esa imagen. Obviamente, el santo no puede en ningún caso ser identificado con la materia de la que está compuesta la imagen. Esta distinción es importante para responder de modo cristiano a aquellos que pretendían como universal y perenne la observancia de la severa prohibición del Antiguo Testamento de utilizar las imágenes en el culto. Esta era la gran discusión también en el mundo islámico, que acepta esta tradición judía de la exclusión total de imágenes en el culto. En cambio los cristianos, en este contexto, han discutido sobre el problema y han encontrado la justificación para la veneración de las imágenes. Así pues, San Juan Damasceno es testigo privilegiado del culto de las imágenes, que ha sido uno de los aspectos característicos de la teología y de la espiritualidad oriental hasta hoy. Sin embargo, es una forma de culto que pertenece simplemente a la fe cristiana, a la fe en el Dios que se hizo carne y se hizo visible”. Lo que la Sagrada Biblia prohíbe es hacer imágenes para adorarlas, pero no prohíbe venerarlas, pues son instrumentos para recordar y celebrar que sí es posible responder positivamente al Señor en el seguimiento de sus huellas. Murió en el año 749 en Jerusalén. El Papa León XIII lo declaró Doctor de la Iglesia en 1890.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario